dimecres, 16 de maig del 2018

Que los penalistas del PSOE le expliquen a Sánchez las cosas antes de que se lance al ruedo afirmando lo que el Código Penal no dice sobre la rebelión




Teresa Freixes advierte al líder del PSOE que no se meta en camisa de once varas:

Me gustaría que los penalistas del PSOE, que los hay y buenos, explicaran a su Secretario General las cosas antes de que éste se lanzara al ruedo afirmando lo que el Código Penal no dice.

Fíjense: Sr. Sr. Sánchez propone reformar el delito de rebelión porque el CP lo que regula son los golpes militares, golpes armados en suma, no lo que ha sucedido en Cataluña. Veamos qué dispone el Código Penal:

TÍTULO XXI

Delitos contra la Constitución

CAPÍTULO PRIMERO

Rebelión

Artículo 472

Son reos del delito de rebelión los que se alzaren violenta y públicamente para cualquiera de los fines siguientes:

1.º Derogar, suspender o modificar total o parcialmente la Constitución.

2.º Destituir o despojar en todo o en parte de sus prerrogativas y facultades al Rey o Reina o al Regente o miembros de la Regencia, u obligarles a ejecutar un acto contrario a su voluntad.

3.º Impedir la libre celebración de elecciones para cargos públicos.

4.º Disolver las Cortes Generales, el Congreso de los Diputados, el Senado o cualquier Asamblea Legislativa de una Comunidad Autónoma, impedir que se reúnan, deliberen o resuelvan, arrancarles alguna resolución o sustraerles alguna de sus atribuciones o competencias.

5.º Declarar la independencia de una parte del territorio nacional.

6.º Sustituir por otro el Gobierno de la Nación o el Consejo de Gobierno de una Comunidad Autónoma, o usar o ejercer por sí o despojar al Gobierno o Consejo de Gobierno de una Comunidad Autónoma, o a cualquiera de sus miembros de sus facultades, o impedirles o coartarles su libre ejercicio, u obligar a cualquiera de ellos a ejecutar actos contrarios a su voluntad.

7.º Sustraer cualquier clase de fuerza armada a la obediencia del Gobierno.


Artículo 473

1. Los que, induciendo a los rebeldes, hayan promovido o sostengan la rebelión, y los jefes principales de ésta, serán castigados con la pena de prisión de quince a veinticinco años e inhabilitación absoluta por el mismo tiempo; los que ejerzan un mando subalterno, con la de prisión de diez a quince años e inhabilitación absoluta de diez a quince años, y los meros participantes, con la de prisión de cinco a diez años e inhabilitación especial para empleo o cargo público por tiempo de seis a diez años.

2. Si se han esgrimido armas, o si ha habido combate entre la fuerza de su mando y los sectores leales a la autoridad legítima, o la rebelión hubiese causado estragos en propiedades de titularidad pública o privada, cortado las comunicaciones telegráficas, telefónicas, por ondas, ferroviarias o de otra clase, ejercido violencias graves contra las personas, exigido contribuciones o distraído los caudales públicos de su legítima inversión, las penas de prisión serán, respectivamente, de veinticinco a treinta años para los primeros, de quince a veinticinco años para los segundos y de diez a quince años para los últimos.


A DESTACAR:

1.- La rebelión no necesita golpe militar ni levantamiento armado: Es un alzamiento público y violento para, entre otras cosas, derogar total o parcialmente la Constitución o declarar la independencia de una parte del territorio nacional. Objetivos que los secesionistas explicitan continuamente. Y en cuanto a la violencia, no se indica de qué clase, por lo que puede ser física, verbal o psicológica, como en cualquier otro delito violento.

2.- El uso de armas constituye una agravante del delito de rebelión, que hace aumentar la pena. No es un elemento constitutivo de la existencia del delito.


No nos metamos en camisas de 11 varas, Sr. Sánchez... que Vd. pretende ser Presidente del Gobierno de España y no se lo puede permitir.


La carta en la que un centenar de juristas piden a Rajoy que tome medidas contra Torra




CRÓNICA GLOBAL.- La intervención de Quim Torra en la sesión de investidura en el Parlament ha dejado muchas dudas entre distintos profesionales del mundo del derecho y la ciencia política, juristas y abogados, también entre historiadores y economistas. Y un centenar de ellos han suscrito una carta enviada a Mariano Rajoy en la que le piden que tome medidas contra el ya nuevo presidente de la Generalitat para impedir que pueda ejercer el cargo.

Entre los primeros firmantes del documento, en el que se suscribe la petición, figura Rafael Arenas, catedrático de derecho internacional; Francesc de Carreras, catedrático de derecho constitucional; Montserrat Baras, profesora titular de ciencia política; Joaquim Molins, catedrático de ciencia política; Teresa Freixes, catedrática de derecho constitucional; Ana Losada, activista por una escuela neutral; Ana María Magaldi, fiscal; Francesc Jufresa, abogado penalista; Joaquim Coll, historiador o Francisco Javier Béjar, abogado.


Texto íntegro de la carta a Rajoy

AL PRESIDENTE DEL GOBIERNO DE ESPAÑA

Por medio de este escrito me dirijo al Presidente del Gobierno de España, responsable último del mismo y, por tanto, de la dirección de “la política interior y exterior, la Administración civil y militar y la defensa del Estado” (artículo 97 de la Constitución) a fin de solicitar el AMPARO del Gobierno y de la Administración española ante la situación generada en Cataluña como consecuencia de la designación del Sr. Joaquim Torra i Pla como Presidente de la Generalitat.

Es por todos sabido que el pasado día 12 de mayo, en el discurso que el Sr. Torra i Pla dirigió al Parlamento de Cataluña para solicitar su designación como Presidente de la Generalitat indicó que su acción de gobierno se basaría en “la lealtad al mandato del 1 de octubre” y en construir un Estado independiente en forma de República. Tal y como puede comprobarse de su discurso y demás intervenciones tanto el día 12 de mayo como el 14 de mayo, su propósito expreso manifestado de manera solemne ante la Cámara es el de construir la República Catalana y continuar con el proceso de secesión que incluyó el referéndum del 1 de octubre y la “declaración política de independencia” (palabras textuales del Sr. Torra i Pla) del 27 de octubre.

El Sr. Torra i Pla presentó, por tanto, un programa que implica la derogación de facto de la Constitución en Cataluña y del Estatuto de Autonomía de Cataluña; y fue con ese programa con el que obtuvo la confianza de la Cámara.

Obvio es que el contenido de todas sus intervenciones implica ya no un acatamiento a la Constitución y al resto del ordenamiento jurídico, sino una expresa manifestación de desobediencia.

El Tribunal Constitucional, en su Sentencia 259/2015, de 2 de diciembre de 2015 (BOE 12-I-2016); entre otras, estableció que:

“Como consecuencia recae sobre los titulares de cargos públicos un cualificado deber de acatamiento a dicha norma fundamental [la Constitución], que no se cifra en una necesaria adhesión ideológica a su total contenido, pero sí en el compromiso de realizar sus funciones de acuerdo con ella y en el respeto al resto del ordenamiento jurídico (…). Que esto sea así para todo poder público deriva, inexcusablemente, de la condición de nuestro Estado como constitucional y de Derecho”.

Es por ello que en la toma de posesión de los cargos públicos se exige, en determinados supuestos, una muestra de expreso acatamiento a la Constitución, que puede hacerse por imperativo legal o incluir fórmulas de carácter particular que elija quien ha de prestar el juramento o promesa; pero esta posibilidad “tiene, sin embargo, como límite el que su formulación desnaturalice o vacíe de contenido el acatamiento mismo mediante fórmulas que supongan un fraude a la Ley o priven de sentido al propio acatamiento” (Sentencia del Tribunal Constitucional 74/1991).

Es claro, por tanto, que pese a que en España no se siga el principio de “democracia militante” y puedan, por tanto, defenderse posiciones políticas contrarias a los valores constitucionales, es exigido que las autoridades públicas ajusten su comportamiento a la Constitución y al resto del ordenamiento jurídico, ya que esta adecuación de la actuación de las autoridades y de la administración se conecta con el carácter de “Estado de Derecho” de nuestro país.

Este necesario sometimiento de las autoridades y de la administración al ordenamiento jurídico no es una mera formalidad, sino también una garantía para los ciudadanos, quienes tenemos el derecho de esperar que los poderes públicos actuarán dentro del marco legal. Repugna a la seguridad jurídica que los ciudadanos podamos estar sometidos a un poder público que se sitúa al margen de la ley.

Y también repugna a la seguridad jurídica la mera amenaza de actuar al margen de la ley. Es evidente que una declaración cuyo contenido sea anunciar el incumplimiento del ordenamiento jurídico debería tener consecuencias políticas, tanto a nivel de partidos y opinión pública como en lo que se refiere a la acción de gobierno; y dejando de lado las posibles actuaciones penales que pudieran derivarse. ¿Podemos imaginarnos por un momento al Presidente del Gobierno afirmando con solemnidad en el Congreso de los Diputados que su actuación de gobierno no estará sometida a los límites constitucionales y que no se entiende sometido a la ley y al Derecho? ¿Permaneceríamos indiferentes ante esta declaración y esperaríamos pacientes a que dicha declaración se convirtiera en algún tipo de hecho; es decir, esperaríamos a que la amenaza se concretara y entretanto miraríamos complacientes a quien la profiere? ¿Por qué, entonces, hacemos esto cuando quien realiza tal amenaza es el que ha sido designado como Presidente de una Comunidad Autónoma? ¿Es que los ciudadanos de Cataluña no merecemos, al igual que el resto de los españoles, vivir en una sociedad en la que los poderes públicos no solamente actúen dentro del marco legal, sino que hagan expreso este acatamiento y cesen en sus amenazas a los ciudadanos?

Las amenazas de actuación al margen de la ley emitidas por el Sr. Torra i Pla causan ya un daño cierto a la seguridad jurídica y perjudican a los ciudadanos catalanes. Máxime cuando estas amenazas no hacen más que dar continuidad –de manera expresa- a los hechos de septiembre/octubre que tantos perjuicios nos causaron, tanto dañaron la imagen de Cataluña y del conjunto de España y tanto debilitaron nuestra posición internacional.

Las palabras siempre son graves; pero cuando, además, estas palabras se realizan en un contexto de verosimilitud, dejarlas caer en el vacío es una enorme irresponsabilidad que como ciudadanos hemos de denunciar ya no solo en aras del interés general, sino también apelando a los perjuicios que individualmente nos causa este sometimiento a quien se propone –así lo ha manifestado- destruir nuestro marco de convivencia en Cataluña.

Soy consciente de que lo anterior no me otorga la posibilidad de exigir una actuación política al Gobierno que pueda estar respaldada por los tribunales. El Presidente del Gobierno a quien tengo el honor de dirigirme goza de la competencia constitucional para determinar cuándo ha de actuar y cuándo no; y solamente en los casos más graves de dejadez podría haber una responsabilidad jurídica por su inacción; pero lo anterior tampoco me impide ejercer mi derecho como ciudadano de dirigirme al máximo responsable de la dirección política del país para pedirle que ejerza las funciones constitucionales que tiene atribuidas a fin de proteger el orden constitucional en Cataluña y la seguridad jurídica de sus ciudadanos y adopte las medidas necesarias para que el Sr. Torra i Pla, habiendo defendido el programa de gobierno que presentó los días 12 y 14 de mayo ante el Parlamento de Cataluña, no pueda ejercer de manera efectiva el cargo de Presidente de la Generalitat de Cataluña, con todas las funciones inherentes a dicho cargo; al menos en tanto en cuanto no manifieste de manera clara e inequívoca aquello a lo que constitucionalmente está obligado: su acatamiento a la Constitución y al resto del ordenamiento jurídico.




El hilo de Caín o como los nacionalistas descubrieron que los 'fachas' son ellos





El periodista José García Domínguez ha provocado un terremoto en Twitter tras simular un artículo del nuevo presidente catalán Quim Torra cambiando la palabra "españoles" por "catalanes". El troleo ha sido destapado este martes, casi dos días después de su publicación cuando bastantes independentistas ya habían picado el anzuelo. Para unos, el artículo era 'asqueroso' y una evidencia del fascismo español. Otros, habían pedido incluso la intervención de la policía y de los jueces.

Lo que esos independentistas no sabían cuando dispararon sus tuits es que Domínguez escribió el artículo utilizando no solo frases de Quim Torra sino también de otros políticos nacionalistas como Daniel Cardona, Heribert Barrera o el propio Jordi Pujol. Al descubrirse el engaño, al verse reflejdos en el espejo, la mayoría de los indepes han corrido a borrar sus tuits. Pero para su desgracia, siempre hay alguien alerta en la red. En este caso, Ciudadano Caín (@ciudacain), que ha creado el siguiente hilo en Twitter recogiendo tuits borrados posteriormente por los indepes.

Ahí va el hilo:

Un hilo de Ciudadano Caín



El artículo que intercambia los gentilicios en frases xenófobas y racistas de Pujol, Junqueras, Barrera, Gispert y Torra ha sido la mayor trolebrada a los nacionalistas desde lo de Tabarnia. Como ya están desapareciendo las respuestas de indepes horrorizados, va el hilo de capturas 👇
Este ha sido el más sonado, el amigo Enric se define como "Periodista, profesor de la URL, escriptor, una mica historiador ..."
La doctora Ana dice que tenía que traducir para que todo el mundo lo supiese. Estoy de acuerdo. De hecho es lo que ha hecho el artículo, "translatelo" para que entendió lo que dicen en realidad vuestros líderes, y ha funcionado.
Aunque como pasó con Tabarnia, poner al nacionalismo ante el espejo no parece servir de mucho. Este señor se da cuenta del engaño pero la conclusión es que los españoles somos imperialistas de nacimiento. Es nuestro sino, qué le vamos a hacer.
Este no necesita traducción. Ni chiste, se hace solo.
Supremacismo del bueno, con denominación de origen protegida (y subvencionada por todos nosotros durante 4 décadas).
A su bola
Fascismo y narcisismo. Y tanto, amigo Groncserot, y tanto
No has tenido que estomago para terminarlo, no me extraña.
¿Si Torra es fascista, el que está escrito esta ignominia qué es? Pues el fascista Torra, entre otros. Dice que le dan miedo las fobias que han dado lugar a genocidios, igual Diana abre los ojos cuando se cuenta de quiénes es leído en realidad, seamos optimistas.
Quién es el xenófobo, el racista, el nazi y el supremacista, quién insulta y amenaza, se pregunta. Diana, la respuesta te sorprenderá.
Cierto, así va de culo, para qué nos vamos a engañar. Pero la realidad supera a la ficción: primero tolera a los políticos como estos, y luego financian con el dinero de todos para que blanqueen y justifiquen estas barbaridades supremacistas.
Inigualables por publicar estas cosas. Ojalá.
Odio y rencor casi al nivel de Ciudadanos. Casi
María se pregunta si no era Hitler el de los dispares de la genética. Y concluye que hay una falta de razonamientos sólidos que quieren de vuelta.
Esta chica espera que sea una broma, una falsa novedad. Me temo que no, es una triste realidad
"Lo del ADN lo comentó Junqueras y la que se lió". Ya ves
Núria ha empezado a leer y no ha podido continuar. Asqueroso, añade.
Lo del supremacismo lo ha visto a la primera. Pero añade que no has visto nunca un español. Tampoco es que me extrañe.
Odio, rabia, rencor, locura ... Un festival.
Y la ideología que hay detrás ni te cuento. Un mojón como el Kilimanjaro.
Este no tiene cuenta del supremacismo que arrastra aunque viniera a darle una colleja cada mañana, me temo.
Sí, por favor, enviadlo.
Una no puede seguir leyendo, el otro se deprime, Immacd concluye que el artículo quiere decir que van por el buen camino. Me quedo con Inmacd, destila optimismo.
Esto lo tienen que saber Juncker y Europa. ¿Qué dirían los alemanes de esto?
Quien es el animal que dice estas animaladas. Pues entre otros el presidente de Cataluña investido hoy.
No tiene nombre, dice ... Sí que lo tiene.
Otro que no puede terminar de leer lo que dicen los políticos a los que vota porque tiene que ir a vomitar.
Este se pregunta por dónde se puede encontrar estos pirados y propone montar un psiquiátrico.
Termino el hilo con este zasca de Miquel a Beni que me parece que resume bastante bien todo el asunto.
El artículo original, que me ha pedido varios varios: (libertaddigital.com/opinion/jose-g...)
Y la traca final, una de las "coautoras" del artículo, cuenta de qué va la vaina, qué para la desgracia del que ha escrito este texto inmundo, parece que habla de los españoles.
Y captura -gracias a @lademadriz- de su reacción en la que vemos que oh, sorpresa, el texto ha pasado de ser inmundo y de destino odio a decir muchas cosas que son verdad pero políticamente incorrectas! @nuriadgc ha resumido toda la enfermedad moral del nacionalismo en 2 tweets.